Su nominación se concretó, ya que no prosperó
la contratación de Eduardo Rivera. Este no aceptó la propuesta de la
dirigencia, que quiso que dirija solamente el plantel principal y no la
reserva. Palacios admitió el año pasado públicamente que era manipulable por
los dirigentes, inclusive, aceptó una alineación que le propuso el ahora expresidente,
Hermenegildo Aníbal Cáceres, tras desafectar a varios atletas profesionales que
ni siquiera cobraban sus salarios.
A pesar de los antecedentes nefastos, los
nuevos dirigentes del club, encabezados por Rubén Cáceres, optó por contratar a
Palacios, que no tiene mucha experiencia como entrenador. Sin embargo, el lema
es para volver a Primera.
Rivera, consultado porqué no acordó su
vinculación, dijo por la 89.1 FM: “No hubo acuerdo, dejamos en suspenso para
otras oportunidades. No concuerdo con la política que desean implementar”.
Añadió: “Supuesta-mente la reserva es la caja
recaudadora, no estoy para esas cosas. Soy una persona que mantengo una una
línea de conducta y considero que la reserva tiene que trabajar físicamente
como la primera y emplear el mismo sistema de juego, porque de ahí el
entrenador se surte. Parece que los dirigentes no lo entendieron así”.
Sostuvo también que el nuevo presidente no
tiene mucho peso. “Dejé una oferta porque le dí mi palabra al presidente de
Cerro de Franco, pero parece que él no tiene mucho peso. Me dijo que si no se
acataba la orden, los supuestos dirigentes, no iban a aportar económicamente”,
enfatizó.
Vanguardia
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